No basta ser bueno: es necesario tambien parecerlo, por acatamiento a la sociedad, por consideración a sí mismo y por respeto a la verdad
Ni el vil acatamiento de la prensa del franquismo se puede comparar con el vasallaje corrupto y de consecuencias tan nefastas para la ciudadanía como el que tienen los medios de comunicación catalanes
La religiosidad verdadera exige humildad y modestia
Nosotros, los vascos, evitemos el mortal contagio, mantengamos firme la fe de nuestros antepasados y la seria religiosidad que nos distingue, y purifiquemos nuestras costumbres, antes tan sanas y ejemplares, hoy tan infestadas y a punto de corromperse por la influencia de los venidos de fuera.
Como católico que soy he visitado con reverencia los conventos que heredamos de nuestros antepasados, nunca ha dejado de conmoverme el sentimiento de paz y bienestar que se apodera de mi espíritu. Como quisiera que se reconociera en alguna de mis obras las huellas de esas experiencias.
Teniendo respeto y reverencia por la vida, entramos en una relación espiritual con el mundo.