Todo Estado castiga más severamente los delitos que amenazan su principio particular de vida, mientras que en los demás muestra no raramente una benignidad que contrasta de modo llamativo.
Natura nihil facit frustra. Entonces, ¿por qué me dio a mí tantos y tan profundos pensamientos si no iban a encontrar ninguna simpatía entre la gente?
No tengo simpatía alguna por ningún partido político o, mejor dicho, los aborrezco a todos, porque todos me parecen igualmente limitados, falsos, pueriles, empleados en lo efímero, sin visión de conjunto y sin elevarse jamás más allá de lo útil.
Si yo he pecado por pintarlo, pido perdon... pido perdón... Pero yo lo he hecho con muy buena intención
No basta la buena intención del mandatario, es indispensable el factor colectivo que representan los trabajadores. Al pueblo de México ya no lo sugestionan las frases huecas: libertad de conciencia, libertad económica.
Encontramos a menudo una benevolencia inexplicable que nos ofende, porque demuestra que no se nos toma bastante en serio.
Cuando la naturaleza formo nuestra especie, nos dio unos cuantos instintos, el amor propio para nuestra conservación, la benevolencia para la conservación de los otros, el amor que es común con todas las demás especies y el don inexplicable de combinar mas ideas que todos los demás animales juntos; después de habernos dado así nuestro lote, nos dijo: ahora, arreglaros como podáis.