La juventud necesita creerse, a priori, superior. claro que se equivoca, pero esta es precisamente el gran derecho de la juventud
Ya que su serenísima majestad y sus altezas exigen de mí una respuesta sencilla, clara y precisa, voy a darla, y es ésta: Yo no puedo someter mi fe ni al papa ni a los concilios, porque es tan claro como la luz del día que ellos han caído muchas veces en el error así como en muchas contradicciones consigo mismos
Estoy convencido, de que si los esfuerzos por divorciar la política de la religión no se hubiesen hecho como se hicieron, la política no habría degenerado como con frecuencia ocurre... He conocido a muchos hombres religiosos que eran políticos disfrazados. Yo mismo, que tengo la apariencia de político, soy, de corazón, un hombre religioso.
He conocido burgueses encantadores y discretos. ¿Ustedes creen que todo lo que ha aportado la burguesía es malo? No. Algo habrá que conservar de ella.