Nosotros dos somos los únicos conspiradores. Vuestra merced, por haber agobiado al país con exacciones insoportables, y yo, por haber querido libertar al pueblo de semejante tiranía
Entrar en el terreno de los hechos es entrar en el mundo de los límites. Las cosas pueden emanciparse de ciertas leyes accidentales o pegadizas, pero no pueden escapar a las leyes de su naturaleza. Se puede libertar a un tigre de su jaula, pero no de su piel manchada.