Su desbordante y entusiasta imaginación se veía matizada por la gran sensibilidad de su espíritu. Su corazón rezumaba afecto, y su amistad era de esa naturaleza fiel y maravillosa que la gente de mundo se empeña en hacernos creer que sólo existe en el reino de lo imaginario.
La verdadera grandeza se logrará gracias a la mente desbordante que trabaja desinteresadamente, con respeto mutuo, para beneficio mutuo.
El alma rebosante de dulce deleite jamás será profanada.
Con el corazón repleto de verdades como rocas.Con mi boca repleta de habilidades, como pocas. Con mi vida escrita en verso en ciudades que sólo ponen dieces como notas
Quien huye de la vida es porque ama demasiado a la vida. Los hombres vulgares creen que un filósofo es un hombre de alma árida. Todo lo contrario. ¿Cómo puede analizar la vida el que no tiene el corazón repleto de vida? ¿Cómo puede conocer las pasiones, y los deseos, y los movimientos del alma, el que no tenga un alma atormentada?